El escritor Mario Vargas Llosa aseguró que en dicho espacio se rendirá homenaje por igual a todos los peruanos que sufrieron el terrorismo, sin distingos políticos o partidarios.
Como presidente de la comisión organizadora de este proyecto, Vargas Llosa participó, vía internet desde Madrid, en la sesión de concejo de Miraflores donde se tomó la decisión de ceder en uso un terreno ubicado cerca al ex cuartel San Martín, en la avenida El Ejército, para la construcción del Museo de la Memoria.
“Ustedes son concientes de que hay susceptibilidades y temores que se han expresado de múltiples maneras en torno al museo de la memoria, yo les puedo asegurar (…) que va a ser una institución imparcial, absolutamente neutral, no partidista, que va a dar testimonio del sufrimiento de todas las víctimas, con prescindencia de colores o posiciones políticas”, manifestó.
Consideró significativo que sea Miraflores el distrito que albergará este proyecto, pues dicha jurisdicción fue seriamente afectada por el terrorismo, particularmente por el atentado de Tarata, en 1992.
Pero, además, refirió que en el terreno personal ninguna otra localidad está tan ligada a su infancia y adolescencia como Miraflores, donde vivió desde los diez años, y que ha servido de escenario de muchas de sus célebres novelas.
El autor de “Conversación en la Catedral” y otros títulos dijo que el Museo de la Memoria está llamado a ser un punto de encuentro y reconciliación de todos los peruanos, donde se recuerde la barbarie y el sufrimiento que causó el terrorismo, pero también la importancia de vivir en democracia y tolerancia, para que la historia no se repita.
“No será una institución partidista o propagandista, el Museo de la Memoria no va a servir a los intereses de ningún partido, tendencia política, sector determinado; va a ser una institución donde los peruanos deben encontrarse, reconciliarse y aprender la lección de la historia, para que nuestro país no vuelva a experimentar una catástrofe tan terrible como la vivida por culpa del terrorismo”, señaló.
Como presidente de la comisión organizadora de este proyecto, Vargas Llosa participó, vía internet desde Madrid, en la sesión de concejo de Miraflores donde se tomó la decisión de ceder en uso un terreno ubicado cerca al ex cuartel San Martín, en la avenida El Ejército, para la construcción del Museo de la Memoria.
“Ustedes son concientes de que hay susceptibilidades y temores que se han expresado de múltiples maneras en torno al museo de la memoria, yo les puedo asegurar (…) que va a ser una institución imparcial, absolutamente neutral, no partidista, que va a dar testimonio del sufrimiento de todas las víctimas, con prescindencia de colores o posiciones políticas”, manifestó.
Consideró significativo que sea Miraflores el distrito que albergará este proyecto, pues dicha jurisdicción fue seriamente afectada por el terrorismo, particularmente por el atentado de Tarata, en 1992.
Pero, además, refirió que en el terreno personal ninguna otra localidad está tan ligada a su infancia y adolescencia como Miraflores, donde vivió desde los diez años, y que ha servido de escenario de muchas de sus célebres novelas.
El autor de “Conversación en la Catedral” y otros títulos dijo que el Museo de la Memoria está llamado a ser un punto de encuentro y reconciliación de todos los peruanos, donde se recuerde la barbarie y el sufrimiento que causó el terrorismo, pero también la importancia de vivir en democracia y tolerancia, para que la historia no se repita.
“No será una institución partidista o propagandista, el Museo de la Memoria no va a servir a los intereses de ningún partido, tendencia política, sector determinado; va a ser una institución donde los peruanos deben encontrarse, reconciliarse y aprender la lección de la historia, para que nuestro país no vuelva a experimentar una catástrofe tan terrible como la vivida por culpa del terrorismo”, señaló.
