La Comisión Permanente de Procesos Administrativos de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) de Huancayo determinó separar en forma definitiva del magisterio a Robert Huaynalaya, por falta administrativa de acto de violencia y agraviar verbalmente a su superior.
Al dirigente de los profesores se le abrió proceso administrativo después de agredir al titular de la Dirección Regional de Educación de Junín (DREJ), Walter Angulo, durante un debate sobre la municipalización de la educación.
Huaynalaya propinó puñetes y puntapiés a Angulo mientras los profesores Alejandro Aranda y Rodolfo Esteban Ccora lanzaban insultos al funcionario del sector Educación, hechos que en su momento fueron denunciados ante la autoridad competente.
La Comisión de Procesos Administrativos tomó la manifestación de las autoridades de la localidad, profesores, dirigentes y padres de familia antes de tomar una decisión.
También tomó en cuenta el artículo 45 de la Ley de Profesorado, que establece los derechos y deberes del servidor público.
Así, conforme a lo establecido por el artículo 127 del Decreto Supremo 19-90-ED, se emitió la Resolución Directoral 002958 ordenando la separación definitiva del citado profesor del magisterio nacional.
Consultado sobre la medida, el presidente regional de Junín, Vladimiro Huaroc, manifestó que “todos los servidores públicos estamos sujetos a cumplir y respetar la normatividad vigente de la carrera administrativa”.
La sanción a Robert Huaynalaya Camposano, agregó, está enmarcada dentro de la Ley del General de Educación y otras vinculantes.
Señaló que esta sanción debe ser tomada por la población y el magisterio peruano de modo reflexivo. “Huaynalaya tiene el derecho, si así lo decide, de apelar, y será la última instancia quien determine su continuidad en la carrera pública”, apuntó.
De otro lado, Huaroc reiteró que no tiene nada personal contra Huaynalaya y si en algún momento discrepó con él fue por la actitud que demostraba como docente, asegurando que la Comisión Permanente elaboró la mencionada resolución respetando el debido proceso.
“Rechazo de plano algunas versiones antojadizas que quieren politizar esta sanción, reitero mi posición demócrata de respeto al derecho ciudadano de revocar a sus autoridades si así lo estima conveniente”, expresó.
Agregó que “el recojo de firmas iniciado por el señor Huaynalaya para solicitar mi revocatoria no tuvo apoyo de la colectividad, por cuanto es inaudito que se quiera vincular esta sanción como venganza política". "Este ardid no debe ser utilizado para distraer y mal informar a la población que ahora más que nunca debe estar tranquila y segura que sus autoridades imponen el principio de autoridad”, culminó.
Tomado de Andina (Agencia Peruana de Noticias)