Instalaciones de Radio Caracas Televisión, cerrada por Chávez
LUDMILA VINOGRADOF | CARACAS
El presidente Hugo Chávez dio un “regalo” a los venezolanos en la celebración del 52 aniversario de la caída de la última dictadura: ordenó el cierre de Radio Caracas Televisión, RCTV, y otros cuatro canales internacionales porque no le habían transmitido ayer su discurso en cadena presidencial.
La salida de la señal por cable de los cinco canales ocurrió en la medianoche del sábado para amanecer hoy domingo. Además de RCTV, también se afectaron Ritmo Son, Momentum, América TV, American Network y TV Chile.
La orden presidencial fue ejecutada por el director del Consejo Nacional de Telecomunicaciones, Conatel, Diosdado Cabello, quien exigió a las operadoras internacionales sacar de su programación a los canales que no habían acatado la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión, denominada Ley Resorte, que obliga a los medios audiovisuales a transmitir de forma obligatoria los mensajes gubernamentales y encadenarse a los discursos de Chávez.
No estamos cerrando a nadie. Si es un canal internacional puede salir en cualquier país, pero en Venezuela deben cumplir la ley
“Nosotros no estamos cerrando a nadie, no estamos cerrando ni un puesto de trabajo. Si es un canal internacional puede salir en cualquier país, pero en Venezuela las cableoperadoras deben cumplir la ley y sacar del aire al que no cumpla la ley”, señaló Cabello, también ministro de Obras Públicas y Vivienda.
El ministro reiteró que los canales que tengan el 70 % de su programación de producción nacional son considerados canales nacionales y que por lo tanto deben transmitir los mensajes oficiales.
También ratificó que los 227 canales internacionales que se emiten por cable deben demostrar en Conatel que el 70 % de su producción es extranjera para no conectarse a las cadenas presidenciales.
La televisión por cable ha tenido un éxito espectacular en el país. Los venezolanos de sectores populares, aburridos del mismo discurso, pagan lo que sea para no ver “las cadenas de Chávez”, que se transmiten por los canales nacionales de señal abierta a toda hora y todos los días.
“Los que no estén cumpliendo la ley tienen que salir de la programación. Este debe cumplirse en las próximas horas. Aquí tenemos reglas claras para todos, el Estado está haciendo cumplir la ley”, dijo Cabello en una rueda de prensa convocada ayer a las 9 de la noche.
Segundo cierre
Con sus 55 años a cuestas, el canal RCTV, es el más antiguo de Venezuela, y anoche vivió su segundo cierre. El primero fue hace dos años y medio cuando Chávez silenció la señal abierta y no le renovó el permiso oficial por ser crítico.
De 3.500 trabajadores que tenía antes del primer cierre pasó a 1.500 empleados que ahora ven su destino laboral oscuro con la suspensión de su emisión internacional.
Andrés Mogollón, redactor del informativo El Observador , dijo que desde el anuncio del ministro Cabello, quien aseguró que RCTV Internacional era un productor nacional, supo que “los querían sacar del aire” pues las cable operadoras corrían el riesgo de ser sancionadas.“Me parece injusto porque una medida como esta afecta a los trabajadores no solo al canal”.
De 3.500 trabajadores que tenía antes del primer cierre pasó a 1.500 empleados que ahora ven su destino laboral oscuro
Alvaro Elgarra, también redactor del informativo El Observador, aseguró que el gobierno no deja que haya una voz crítica que diga las verdades. Por eso cierra a RCTV y a 34 emisoras de radio. “Esta medida va en contra de toda la población que no va a poder decir lo que siente ni expresar, sino lo que se diga en los medios oficiales”.
Carlos Vecchio, representante de la ONG Voluntad Popular, calificó de “política y vengativa” la medida de cierre. “El gobierno busca silenciar los problemas que padecen los venezolanos. También “busca tener hegemonía comunicacional”.
Juan José Molina, diputado del partido Podemos, “el cierre fue el regalo que Chávez dio a la oposición. Lo que quiere es provocar, aumentar el descontento para provocar el caos y la desesperación, y tener motivos para suspender las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre”.
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